milagritos

...

martes, 4 de marzo de 2014

BOCHORNOS

Muchas veces la simple idea de querer cambiar
resulta bochornoso...
Oh simplemente no es lo que uno esperaba

¿Como dejar lo que uno ama hacer, por simple in aceptación
de la consciencia?

Oh lo que es peor, ¿como poder olvidar lo que se disfrutaba?

VIAJES

Pareciera que el cielo te clama. las aventuras tocan en la puerta de tu alma encerrada. y mientras tu espiritú se debate
 en la lucha de poder ser libre
tu cuerpo se agita tan irremediablemente que no sabes que es lo que pueda suceder a continuacion.
 es el miedo a lo desconocido...es el miedo a un mundo nuevo que sin saber
ya te pertenecia incluso antes de haber existido... incluso antes de empezar a soñar...
 el viento te invita y mas sin embargo la agitacion sigue en tu vida, golpeando aquella puerta
intentando con todo el poder que se le es concedido, romper ese muro.
si tu dudas los sueños se acaban, se rompen para jamas volver.


Caminando

MI SUPERHEROE

Una vez una persona me preguntó algo que hizo que lo pensara durante mucho tiempo. Para poder darle una respuesta a la que yo estuviera convencida al total por ciento.

>>¿Quién es tu Superheroe?<<
Tiempo después por los ya misteriosos juegos del azar me volví a encontrar a esa persona, paseamos como buenos amigos que no se han visto por mucho tiempo. Charlando acerca de la vida, de la sombras, de los árboles, sentados y acomodados en nuestra fiel pereza le comenté:
-Una vez me preguntaste que, quien era mi Superheroe…mi querido amigo ahora te puedo contestar;
Mi superhéroe no usaba calzones encima de unas mallitas, ni tampoco tenia capa que lo protegiera contra las balas, ni que lo ayudara a volar por la ciudad, tampoco tenia una supervista que le avizara que persona estaba en peligro. Mi superhéroe jamás de los jamases tuvo superpoderes, ni encuentros extraños con sustancias X, ó picaduras de animales, ni mucho menos millones para hacerse de la tecnología que lo hiciera superpoderoso.
Mi superhéroe nunca tuvo que recurrir a la doble vida para proteger su identidad, ni poseía carros ni alfombras mágicas que lo ayudaran a trasladarse rápidamente….No.
Mi Superheroe, fue un héroe de verdad, su traje; el de Charro, sombrero ancho y polainas, protegió a los pobres y les devolvió lo que les pertenecía. El cabalgaba junto al viento esquivando balas de los enemigos y al mismo tiempo quebrándolos como ramas secas de un bosque olvidado por dios.
Siempre libre y nunca confiado, tenía el poder del habla, del corazón,  tuvo el gran poder de hablar con la verdad… de pensar. Poder que lo convirtió en el enemigo de los farsantes, de los traicioneros y de los ricos.
Con su sola mirada humillaba a los que se creían más fuertes que el pueblo. Cananas repletas de balas cubrían su pecho y a un costado su 30-30.
Luchó por el pueblo, luchó por las tierras que les habían arrebatado y sobre todo por la libertad.
Él fue mi superhéroe, ahora extinto, pero viviendo en el corazón de muchas personas, él, mi superhéroe jamás poseyó poderes sobrenaturales… pero si un alma poderosa.

                 “Para que triunfe nuestra revolución,
                           será necesario que yo perezca antes”

                                          Emiliano Zapata

cartas sin entregar

Se que le va a sonar extraño y repito, no quiero que se enoje con migo, o que se sienta incomodo, o que se vea obligado a darme una respuesta poco sincera, eso no sirve. ¿Sabía que usted es el culpable de una de las crisis más importantes de mi vida?, se peguntara de qué o porqué ¿cierto? Bueno, la verdad es que, usted me gusta. Y se lo confieso hasta ahorita (un acto muy cobarde de mi parte decirlo por escrito  y sobre todo porque se lo digo cuando ya estoy a punto de irme) porque me temo lo peor.

Y me refiero a crisis porque para mí no fue fácil aceptar que éste… sentimiento fuera real, y mucho menos fue fácil porque usted es un hombre casado, y seamos sinceros la diferencia de edades es estrecha. Todo esto propicio mi crisis, solo espero que no tome con ligereza  mis palabras, que no le parezca graciosa la carta más difícil que he escrito.


Amigos

Reúno todo el agradecimiento del planeta que me permito y se los extiendo, para regalárselos. Agradecimiento por acompañarme en éste camino llamado vida. Un camino sin duda lleno de obstáculos que se han hecho menos pesados gracias a ustedes, a sus consejos, a sus  sonrisas sinceras, a sus palabras y a sus silencios.
Mil veces gracias por enseñarme que un abrazo es una buena medicina, que siempre existe un hombro, un oído dispuesto a la tortura con el llanto, con las tonterías, con las alegrías, con las tragedias.

Gracias por enseñarme a compartir mis profundas emociones,  a que no debo callarme algo (porque evidentemente ustedes de inmediato se darían cuenta y harían hasta lo imposible para sacar toda, sin excepción de puntos y comas, enterita la información completa)   

Sueños


Sin duda estoy cambiando, mi semblante frente al espejo es otro, es diferente. Mis facciones ahora se levantan más duros, con menos expresiones, ¿Qué es? ¿La edad? (ahora soy ocho años mayor que ayer) ¿la tensión? ¿Los obstáculos que he tenido que pasar? Me imagino que son las tres por junto.He cambiado, no solo por dentro, sino también por fuera, tal vez con el paso de los años, de los días, es difícil detenerse y decirse “Has cambiado, te noto diferente” pero sin embargo lo hago, me detengo y me observo. Mis ojos son más duros (¿Por qué?), pero a la vez más determinados. “Ya nada nos debe detener alma” me dirijo a mí misma, pero la voz que lo pronuncia es de Cecilia –Cecilia la fuerte-. Me sonrió afirmativamente, una sincera sonrisa surca mi rostro pero la expresión de los ojos sigue intacta. “Los sueños y la determinación no deben morir alma, has cambiado, sí, pero los sueños, esos sueños alma nunca permitas que se mueran” –Pausa, me observo fijamente- “Tienes razón, los sueños no deben morir”.



lunes, 4 de marzo de 2013

de lo cotidiano


Maldicion, hoy me levante con la sensación de asco, asco de ésta espera que me está torturando. Asco de las preguntas que me vienen a la mente (como si mi mente fuese culpable de algún crimen atroz) y que no puedo contestar.

 ¿Y a quién no le ha pasado?

Dice una amiga que es  “La crisis existencial” 
Es el vomito de preguntas que te acuchillan… ¿Qué estoy haciendo? ¿Qué es lo que sigue? ¿Para qué lo hago? ¿Por qué? ¿Cuándo? ¿Dónde? ¿Cómo diablos...? ……...un suspiro acalla las demás preguntas.
Dice un poeta pobre, que el escribir calma el alma, mas sin embargo en estos instantes no me puedo tranquilizar,  todo me recuerdo a los problemas que tengo. 

Hazlo, no mires atrás…”  “No lo hagas….detente” “Escucha dentro de ti…”  

Es la hora del trabajo, un trabajo que me tiene harta la existencia, odio admitir que pertenezco ese 70% (en Avery).  Que si no fuese por la necesidad monetaria no estaría haciendo lo que ahora hago. Y digo que odio admitirlo porque fue como si hubiese vendido parte de mi alma por unos cuantos pesos más… y de hecho así fue.
Reconozco a ese otro 30%  que tanto envidio (por ahora); Trabajar en lo que a  uno le gusta hacer es la mayor de las recompensas. Es levantarse e ir con toda la confianza y  orgullo del mundo, el decirse a si mismo “Vas bien”.
Pero al menos yo, en estos instantes no puedo decir eso, no me gustó desde un principio e incluso ahora sigue sin gustarme, es como una medicina amarga;  te da asco, pero sabes que no debes dejar de tomarla. Y no me refiero solamente  a lo que hago ahora, me refiero a TODO lo demás.
Días atrás en una conversación se me quedaron grabadas unas palabras (que hicieron  sinapsis en mi cerebro) sobre el modelo de trabajo gringo; Ésta persona me dijo:

“ ….ya sabes, me refiero al modelo gringo que manejan algunas empresas.”

“¿Modelo Gringo?... “

“ Si, con el modelo gringo se CONCENTRAN en apoyo y capacitaciones, solamente a jefes y supervisores. Poca oportunidad para los de abajo.”  

En un flashback fugaz mi mente viajaba de regreso a avery   ”…mmm con que modelo gringo, así que toda esa dosis de “bourgeoisie” (burguesia) no era más que un modelo de trabajo gringo… ¡habérmelo aclarado antes! …cuantas maldiciones me pude haber ahorrado.

De vuelta a la realidad antes de salir corriendo al trabajo checo mi correo…  ¡diablos! Aún sin respuesta…
Otro ataque de nervios me espera…  y mientras tanto aquí seguimos.