Maldicion, hoy me levante con la
sensación de asco, asco de ésta espera que me está torturando. Asco de las
preguntas que me vienen a la mente (como si mi mente fuese culpable de algún
crimen atroz) y que no puedo contestar.
¿Y a quién no le ha pasado?
Dice una amiga que es “La crisis existencial”
Es el vomito de preguntas que te
acuchillan… ¿Qué estoy haciendo? ¿Qué es lo que sigue? ¿Para qué lo hago? ¿Por
qué? ¿Cuándo? ¿Dónde? ¿Cómo diablos...? ……...un suspiro acalla las demás
preguntas.
Dice un poeta pobre, que el escribir calma el alma, mas sin embargo en
estos instantes no me puedo tranquilizar,
todo me recuerdo a los problemas que tengo.
“Hazlo, no mires atrás…” “No lo
hagas….detente” “Escucha dentro de ti…”
Es la hora
del trabajo, un trabajo que me tiene harta la existencia, odio
admitir que pertenezco ese 70% (en Avery).
Que si no fuese por la necesidad monetaria no estaría haciendo lo que
ahora hago. Y digo que odio admitirlo porque fue como si hubiese vendido parte
de mi alma por unos cuantos pesos más… y de hecho así fue.
Reconozco a ese otro 30% que
tanto envidio (por ahora); Trabajar en lo que a
uno le gusta hacer es la mayor de las recompensas. Es levantarse e ir
con toda la confianza y orgullo del
mundo, el decirse a si mismo “Vas bien”.
Pero al menos yo, en estos instantes no puedo decir eso, no me gustó
desde un principio e incluso ahora sigue sin gustarme, es como una medicina
amarga; te da asco, pero sabes que no
debes dejar de tomarla. Y no me refiero solamente a lo que hago ahora, me refiero a TODO lo
demás.
Días atrás en una conversación se me quedaron grabadas unas palabras
(que hicieron sinapsis en mi cerebro)
sobre el modelo de trabajo gringo; Ésta persona me dijo:
“ ….ya sabes, me refiero al modelo gringo que manejan algunas empresas.”
“¿Modelo Gringo?...
“
“ Si, con el modelo gringo se CONCENTRAN en apoyo y capacitaciones, solamente a jefes
y supervisores. Poca oportunidad para los
de abajo.”
En un flashback fugaz mi mente viajaba de
regreso a avery ”…mmm con que modelo gringo, así que toda esa
dosis de “bourgeoisie” (burguesia) no
era más que un modelo de trabajo gringo… ¡habérmelo aclarado
antes! …cuantas maldiciones me pude haber ahorrado.
De vuelta a la realidad antes de salir
corriendo al trabajo checo mi correo… ¡diablos! Aún sin respuesta…
Otro ataque de nervios me espera… y mientras tanto aquí seguimos.